Este año, tanto la lucha docente como la de los estatales tuvo como particularidad la decisión del gobierno nacional de imponer un techo salarial del 18 % en cuotas, muy por detrás de la inflación proyectada y desconociendo, además, la pérdida del poder adquisitivo que significó la inflación del año 2016. 

A esto se deben sumar los tarifazos, en el marco de una política gubernamental que implica ajuste, precarización, despidos, cierre de empresas y flexibilización con ataques a los Convenios Colectivos de Trabajo.

En este contexto, la pelea por el salario de la docencia universitaria no quedó ajena. El 8 de febrero de este año se realizó la primera reunión de la Mesa Nacional de CONADU Histórica donde se analizó esta situación y cuál debía ser el reclamo de recomposición salarial para este 2017 y se concluyó que esta recomposición debía ser no menor al 25 % y que dado que no se había cumplido con la cláusula gatillo de la paritaria anterior debía sumarse un 10 % de pérdida por inflación, lo que se tradujo en un reclamo inicial del 35 %.

En este sentido, comenzamos un plan de lucha desde muy temprano. Dado a que no recibimos por parte del gobierno una respuesta satisfactoria en el mes de febrero fecha de vigencia de nuestro acuerdo salarial. Febrero nos situó en Córdoba con el II Encuentro de Docentes Preuniversitarios y en el Plenario de CONADU Histórica, que marcaron el inicio de una sucesión de acciones y actividades tanto a nivel nacional como local.

A través de las Asambleas y reuniones de delegados fuimos construyendo un camino que implicó la organización de nuestra lucha. De esta manera, como trabajadores ejercimos nuestro derecho a huelga y utilizamos nuestra mejor herramienta, que es enseñar, para mostrar públicamente en cada clase los contenidos de nuestras cátedras inmersos en la realidad del conflicto: carpas en la plaza independencia y peatonal, bocinazos por el predio universitario, pintadas, manifestación en los conciertos de la orquesta sinfónica, murales, clases y consultas públicas, campaña en las redes sociales, etc. Fue en este contexto de lucha creciente que un grupo de padres, tomando como argumento la política del gobierno provincial de avanzar sobre los derechos de los trabajadores, intentó imponer el descuento de los días de paro. Esto no pudo llevarse a cabo con éxito por la masiva respuesta de los docentes y la unidad conseguida con los estudiantes.

Finalmente, adoptamos la medida más fuerte, medida que hacía mucho tiempo que no realizáramos, tal como fue la no toma de exámenes de las mesas de julio. En este marco de lucha, se realizó una Concentración Docente - Estudiantil en la entrada a la UNCuyo y quienes SI tuvieron mesa de examen fueron el Ministro de Educación, candidato Esteban Bullrich, el Secretario de Políticas Universitarias-SPU, candidato Albor Cantard, el Presidente del CIN y su Ex Presidente y Actual Vice: Rodolfo Tecchi y Guillermo Tamarit, respectivamente. De sus declaraciones en los intercambios, todos los presentes y el “tribunal” evaluaron que resultaron: DESAPROBADOS EN LA DEFENSA DE LA UNIVERSIDAD PÚBLICA. 

Sin embargo, no logramos hacer posible lo necesario porque el gobierno nacional, luego de 6 meses de dilación de la paritaria, “no tuvo una semana más” para considerar la contrapropuesta de la CONADU Histórica. Resultaba urgente para los tiempos electorales que los futuros candidatos cerraran las paritarias de su ministerio. Además, debemos sumar la complicidad de las restantes federaciones: CONADU, FEDUN, UDA, CTERA y FAGDUT, que con su acuerdo, aceptan la extorsión de este gobierno (de la misma manera que acordaban con el gobierno anterior), dejando a miles docentes sin la posibilidad de capacitarse gratuitamente (Los fondos de PROCADOC y PROCyMAT son acordados mediante la firma del acta acuerdo salarial, la federación que no suscribe la misma no participa en la asignación de los fondos y por tanto los docentes (afiliados y no afiliados) no pueden acceder a la capacitación gratuita).

La paritaria 2017 fue una paritaria larga, que se extendió hasta julio y nuestra lucha también. Producto de esta lucha logramos romper con la pretensión el gobierno de imponernos un 18 %, y logramos un 25 % de recomposición salarial. Este porcentaje, incluso, superior al de otros trabajadores del Estado Nacional. La asamblea de FADIUNC consideró que aunque este porcentaje del 25 % no era lo que se pretendía, debía firmarse el acuerdo y redireccionar la lucha de la Federación hacia otros temas fundamentales como son la reforma laboral, la reforma previsional y fundamentalmente la reforma educativa y el presupuesto 2018. Este es el mandato que llevamos al Congreso de la CONADU Histórica que definiría, democráticamente, la no firma del Acta Paritaria y la presentación de una contrapropuesta en la Mesa de Negociación Salarial. Esta contrapropuesta ni siquiera fue leída ni tenida en cuenta por la SPU y el CIN.

La CONADU Histórica y FADIUNC, son organizaciones sindicales que se han caracterizado por la defensa de los trabajadores y no de un gobierno o color político en particular. Como trabajadores organizados sindicalmente luchamos para que se implementen políticas (económicas, sociales, educativas) beneficiosas para el trabajo, la educación y  la salud de todos los argentinos.

Durante los 12 años del gobierno anterior fuimos tildados de “destituyentes” por reclamar paritarias libres y sin topes salariales, Convenio Colectivo y otras reivindicaciones. ¿Qué ha “cambiado” en estos dos años en nuestra Federación? La respuesta es: NADA. Nuestra línea de defensa del derecho de los trabajadores está intacta, no como otros que firmaron topes salariales, paritarias a 16 meses, que “hicieron la plancha” y traicionaron a sus bases. 

Reiteramos, cada vez con mayor convicción, que elegimos y no “caímos” en la educación pública y que defendemos y trabajamos por una Universidad pública, democrática, científica, al servicio de las necesidades del pueblo argentino y del desarrollo nacional. Nos pensamos unidos, luchando mancomunadamente y con auténtico espíritu solidario.

Nuestra lucha nunca ha sido solamente por el salario, sino en una clara defensa de la educación pública, gratuita, laica, científica y al servicio del pueblo argentino. Y declaramos: a la falta de voluntad política y las estrategias de fragmentación y castigo a la docencia universitaria y a la clase trabajadora en su conjunto, nosotros respondemos con UNIDAD, FUERZA Y DEFENSA  IRRENUNCIABLE de nuestros derechos laborales conquistados con la lucha.